Si
amigos. La noche del 31 vamos a celebrar el nuevo año por todo lo alto. Y lo
haremos con todos los amigos de Todo Nos Da
Igual (TONDI) el magazine radiofónico presentado y dirigido por Carlos
Dueñas, en una muy especial Noche de After.
Algunos
de los invitados confirmados somos Pedro Amorós, Miguel Ángel Pertierra, Luis
Dévora, Javier Belmar, José Antonio Caravaca, Iván Torregrosa, Juan Rada,
Alfonso Trinidad y quien esto escribe.
Un
programa especial para despedir el dichoso 2020 y recibir a 2021 con esperanza,
alegría y buen humor. Una gala insólita amenizada por un DJ de excepción, ¡Fernandisco!
Así que
ya sabes. Ponte tus mejores galas y conecta con Radio 4G o Radio Edenex a
partir de la medianoche. Te esperamos para decir todos juntos: ¡Adiós 2020!
Estados Unidos, Rumanía, Rusia, Reino Unido, Holanda,
Colombia y, ahora, España. La estrategia comercial, broma o lo que sea que esté
detrás de todo esto ha recalado en nuestro país. En concreto, lo ha hecho
en un pequeño pueblo de la provincia de Segovia, Ayllón.
Monolito encontrado en Ayllón
De todos es conocido que desde hace varias semanas ha
causado sensación la aparición de una serie de monolitos en medio mundo. El primero
fue encontrado a finales de noviembre en un paraje bastante inaccesible de Utah, Estados Unidos.
Mientras realizaba labores de recuento de
ganado, un grupo de oficiales y biólogos del Departamento de Seguridad Pública
y la División de Recursos de Vida Silvestreencontraron
el primer monolito desde un helicóptero.
A los pocos días, la estructura metálica desapareció sin dejar
rastro, con lo que aumentó aún más el asombro de los aficionados a las noticias
extrañas.En días
posteriores han ido apareciendo monolitos similares en California y en diversas
partes de Europa (Rumanía, Inglaterra, Países Bajos, Rusia…) y América (Colombia),
extendiéndose el interés por la
inusitada noticia.
Y ahora, en
España…
Ahora le ha tocado el turno a España. Hace pocas fechas ha
aparecido un monolito similar a los anteriores en la localidad segoviana de
Ayllón desencadenando toda clase de comentarios.
La alcaldesa de la localidad, María Jesús Sanz, ha declarado que
piensa que la colocación del monolito es obra de unos bromistas y que no es
cierto que centenares de curiosos se hayan acercado al lugar, tal como aseguran
algunos medios.
Ella misma ha visitado el enclave (las ruinas de la iglesia
de Santiago, situadas a escaso medio kilómetro del núcleo urbano) y ha podido
comprobar que se trata de una endeble y rudimentaria estructura formada por
tres chapas metálicas que ya ha sido derribada por el viento varias veces.
La solución
al enigma: una campaña de marketing
A pesar de las variadas hipótesis barajadas que hablan de
teorías del fin del mundo o de mensajes extraterrestres, la solución al enigma se dio a conocer hace pocos días. Según el diario The New York Timesestas obras las realiza un grupo de artistas
de Estados Unidos, concretamente de Nuevo México, que se hacen llamarThe
most famous artist.
Así lo reivindican ellos mismos en su cuenta de instagram (al
menos, los monolitos encontrados en suelo norteamericano) donde, además de explicar
el proceso de producción de las piezas, anuncian su venta por la módica cifra
de 37.000 euros cada una.
Es de suponer que el
resto de estructuras diseminadas por el planeta se deba a la acción de
imitadores que han encontrado interesante la iniciativa de este colectivo
artístico. Este sería también el caso del monolito segoviano que más bien
parece la obra de unos imitadores de bajo presupuesto que han querido apuntarse
a la moda. En fin… una noticia más
para pasar el rato…
La madrugada del pasado miércoles al jueves fue realmente
extraordinaria en la provincia andaluza. Con tan solo treinta minutos de
diferencia se produjo un importante terremoto y el paso por sus cielos de una brillante
bola de fuego.
La noticia de una nueva bola de fuego atravesando el espacio
peninsular ha dejado de ser noticia desde hace tiempo, debido a los numerosos
fenómenos de este tipo que vienen produciéndose sobre la península ibérica.
Esta vez, el suceso tuvo lugar a las 0.40 horas de este
jueves. El conocido astrofísico José
María Madiedo del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) ha analizado
el fenómeno y ha determinado que la roca entró en la atmósfera a unos 147 mil
kilómetros por hora, procedente de un cometa.
El choque con la atmósfera a esta velocidad hizo que la roca
se volviese incandescente y se generase una bola de fuego a una altitud de unos
112 km sobre el nivel del mar, en un punto situado a medio camino entre la
costa de Granada y la de Marruecos.
Los restos del cometa avanzaron en dirección suroeste
durante 77 km hasta que se extinguió a una altitud de 72 kilómetros sobre el
nivel del mar, frente a la localidad marroquí de Alhucemas.
Y un terremoto media hora antes
La casualidad ha querido hacer coincidir este evento con un
terremoto en la zona. Efectivamente, un seísmo de 3.6 grados de magnitud -con
epicentro en la localidad de Pinos Puente- sacudió el Área Metropolitana y la
ciudad de Granada tan solo media hora antes.
La sacudida se dejó sentir por encima de lo esperado debido
a que se produjo a solo seis kilómetros de la superficie. Esta escasa
profundidad le convirtió en un terremoto de relativa importancia, alcanzando una
intensidad similar a los de nivel IV y V.
Granada es una zona de gran actividad sísmica al encontrarse
situada en la placa euroasiática, produciéndose seísmos de relativa importancia.
De hecho, en el área de Pinos Puente hubo una serie de terremotos en 1808 que
llegaron a alcanzar la intensidad VIII.
Sin duda, una noche agitada para los ciudadanos granadinos…
El fenómeno de las bolas de fuego ha empezado a dejar de
sorprender a los seguidores españoles de los eventos aéreos inusuales. Rara
es la semana que no cruza nuestros cielos algún pedazo de cometa o meteorito.
Pero lo que se vivió la madrugada del pasado día 21 de noviembre fue algo
realmente insólito: tres bolas de fuego surcaron el sur penínsular en apenas
45 minutos.
Los tres eventos fueron detectados por el observatorio astronómico hispano-alemán de Calar Alto,
situado en la Sierra de Los Filabres (Almería). Es operado conjuntamente por la Junta de
Andalucía y el Instituto de Astrofísica de Andalucía (CSIC) en Granada y
pertenece al Proyecto SMART.
La primera de las tres bolas de fuego entró en nuestra
atmósferaa las 01:47 horas y se desplazó a una velocidad estimada de unos 202.000 km/h
sobrevolando las costas orientales de la provincia de Almería. La
parte luminosa de este evento comenzó a una altitud de unos 108 km sobre el mar
Mediterráneo y, tras desplazarse en dirección suroeste, finalizó a una altitud
de unos 72 km.
El segundo objeto fue
observado a las 02:21horas y tuvo una velocidad de aproximadamente
101.000 km/h, sobrevolando los cielos del suroeste de la provincia de Ciudad
Real. El observatorio indica que tenía una altitud inicial de 111 km sobre el
terreno. Este bólido se desplazó en dirección noroeste para finalizar a una
altitud de 71 km.
Finalmente, y tan solo unos minutos después, a las 02:32
horas, se produjo el tercer evento
de la noche, que sobrevoló la provincia de Jaén a una velocidad de 101.000 km/h.
La parte luminosa de este fenómeno se inició a 105 km de altitud. El objeto se desplazó
en dirección noreste para finalizar a una altitud de 52 km sobre la misma
provincia de Jaén.
Según el análisis que el profesor José María Madiedo
(Instituto de Astrofísica de Andalucía IAA-CSIC) ha realizado de los tres
objetos, todos ellos han tenido un
"origen cometario". Se
trata, sin duda, de la mayor concentración producida por este tipo de fenómenos
en los últimos años.
A continuación, puedes ver un vídeo con imágenes de los tres
eventos:
Acaba de publicarse el número de agosto de Phenomena Magazine, la revista dedicada
al mundo del misterio, la historia y los fenómenos forteanos. En esta ocasión,
publico un artículo sobre los restos recientemente hallados del meteorito caído en Barcelona en el año 1704.
Puedes encontrarlo a partir de la página 13, pero no te
pierdas el resto de interesantes artículos que se publican este mes. Puedes
descargar gratuitamente la revista en este enlace.
En la madrugada del 20 de julio, a las 3:19 hora local, las
cámaras del proyecto SMART detectaron un fuerte destello de luz que iluminó la
ciudad de Sevilla. Su luminosidad fue tan alta que la noche se hizo día durante
una fracción de segundo. El destello estuvo acompañado por un fuerte estruendo.
El análisis de las imágenes indica que el evento sucedió en
el entorno del Puerto de Sevilla. Se descarta que el fenómeno lo haya producido
algún meteoro o fenómeno atmosférico. De hecho, habría tenido lugar a nivel del
suelo. Recuerda, de hecho, a la deflagración que tuvo lugar en un buque en el
Puerto de Sevilla el 3 de mayo de 2020.
Según informa el propio José María Madiedo, responsable del
proyecto, todo apunta a que el fogonazo y el estruendo se debieron a la
explosión de un transformador en una estación eléctrica ubicada cerca del
Puerto de Sevilla, en la zona sur de la ciudad. De hecho, diversas personas de
esa zona han indicado que en sus viviendas hubo un corte momentáneo de fluido
eléctrico.
Si tienes más información sobre este evento, puedes ponerte
en contacto con criptospain@yahoo.es
A las cinco de la tarde del 25 de diciembre de 1704, una espectacular
bola de fuego atravesó el firmamento y cayó en las inmediaciones de Tarrasa
causando un gran estruendo. Conocido como el meteorito de Barcelona, el fenómeno pudo ser visto desde la Ciudad
Condal hasta Marsella. Los testigos de la época, asombrados y sin ningún
conocimiento sobre estos asuntos, interpretaron el estallido como una señal
divina. El evento quedó recogido de esta manera en más de una veintena de
documentos históricos que han llegado hasta nuestros días.
Fragmentos hallados del metyeorito de 1704. Foto: UPC
Sin embargo, del meteorito no se habían encontrado
fragmentos… hasta ahora. Más de tres
siglos después, un equipo de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) y el
Museo de Ciencias Naturales de Barcelona ha conseguido localizar e identificar
dos pequeños fragmentos del meteorito que habían pasado desapercibidos dentro
de una curiosa colección de objetos de la familia Salvador, un brillante linaje
de boticarios y botánicos catalanes.
«Encontrar un
meteorito 300 años después es increíble. No sé si hay un caso como este»,
reconoce Jordi Llorca, director del Centro de investigación en Ciencia e
Ingeniería Multiescala de la UPC y autor principal del estudio, publicado en la
revista «Meteoritics and Planetary
Science», y que puedes consultar al final de esta entrada.
Los investigadores fueron advertidos de la existencia de las
rocas por los responsables del Instituto Botánico de Barcelona, que actualmente
alberga la colección de miles de libros, plantas y objetos de los Salvador.
Anteriormente, su gabinete de curiosidades se había mantenido en la trastienda
de la antigua farmacia familiar en la calle Ample de Barcelona. Este espacio ya
no existe, pero el Instituto Botánico de Barcelona conserva todo el mobiliario
y las estanterías, una biblioteca con más de 1.500 volúmenes, un herbario único
con casi5.000 pliegos, unos 14.000
especímenes de los reinos animal, vegetal y mineral, así como diarios de viaje
y numerosa correspondencia, todo ello de un extraordinario valor científico
Un mensaje en un
sobre
«En cuanto los vi no
tuve ninguna duda, eran meteoritos», asegura Llorca. Los dos fragmentos, de
50 y 34 gramos, estaban guardados en un frasco de vidrio con un sobre en el que
pone «meteorito?». Dentro, una
anotación incompleta y medio borrada que dice en catalán: « Pe [d] ra [que ca] ygué d’un [..] [..] u es [..]en [..] y 1704. ».
El meteorito es el séptimo más antiguo que se conserva en
todo el mundo y el tercero en Europa. Para su análisis se han utilizado
técnicas avanzadas de tomografía de rayos X, microscopía electrónica y
microsonda electrónica.
Réplica del gabinete Salvador. Foto: J.M. de Llobet.
Los investigadores compararon estos restos con los cuatro
meteoritos conocidos que han caído o se han encontrado en Cataluña entre 1851 y
1905 (caídos los de Nulles-Alt Camp en 1851 y Cañellas- Garraf en 1861, y
encontrados los de Girona en 1899 y Garraf en 1905) y concluyeron que no podía ser confundido con
ninguno de estos. Habían dado con el meteorito de Barcelona de 1704.
«No se sabe cómo la
familia consiguió los fragmentos, pero su recogida fue muy poco después del
impacto», afirma Llorca,ya que las
rocas están muy frescas, aún tienen la corteza negra.
Constituidas
mayoritariamente por silicatos y pequeñas partículas metálicas, provienen de
una condrita ordinaria, un tipo de meteorito muy común. El equipo cree que era
parte de uno de los asteroides primitivos que se agolpan en el cinturón existente
entre las órbitas de Marte y Júpiter. «Pueden
tener aproximadamente 4.600 millones de años, mucho más antiguos que cualquier
roca terrestre», indica el investigador. «Son los adoquines de los planetas, auténticos fósiles del sistema solar»,
añade.
Una señal de Dios
Ilustración del meteorito de Barcelona de 1704. (Josep Bolló, 1717)
En 1704, cuando cayó el meteorito, la población no conocía el
origen de estos fenómenos. La bola de fuego atravesó el cielo un día tan
emblemático como el de Navidad y lo hizo, además, durante la Guerra de
Sucesión, lo que dio lugar a numerosas predicciones y supersticiones. Los dos
bandos en conflicto lo utilizaron con objetivos propagandísticos. Los partidarios
del Archiduque Carlos de Austria lo interpretaron como una señal de Dios a su
favor, mientras que los partidarios de Felipe V lo consideraron una advertencia
a los catalanes por la usurpación de la casa de Austria.
En los últimos años, solo se han podido recuperar dos
meteoritos en España: el de Villalbeto de la Peña (Palencia) en 2004 y el de
Puerto Lápice (Ciudad Real) en 2007. Así que encontrar uno, del que ha habido
testigos hace más de tres siglos, resulta ciertamente algo extraordinario.
Los
fenómenos luminosos sobre nuestros cielos siguen produciéndose sin importarles
–evidentemente- nuestro confinamiento en casa. En las últimas semanas, una
veintena de nuevas bolas de fuego han cruzado la península Ibérica, algunas
provocadas por fenómenos naturales y otras no tanto. Vamos a recordar algunas
de las más interesantes.
12 de abril. Ávila y Cáceres
Una
gran bola de fuego procedente de un asteroide surcó el cielo de las provincias
de Ávila y Cáceres durante esa madrugada, hacia las 05:06 hora peninsular. El
avistamiento fue registrado por los detectores del proyecto SMART y se pudo ver
a más de 400 km de distancia.
Bola de fuego detectada por el proyecto SMART
28 de abril. Alarma
por basura espacial
A las 6:47 de este día, una bola de fuego ha surcado el
cielo del oeste peninsular, desde Andalucía a Galicia, siendo grabado en esta
comunidad, en la que el servicio de emergencias ha recibido varias llamadas de
alarma.
Restos de la sonda Soyuz reentrando sobre La Coruña.
Imagen: Israel Borja Nuñel Timiraos
Al parecer se trata de restos de basura espacial,
concretamente de la sonda Soyuz, entrando en la atmósfera tras el
despegue desde Kazajistán, en una misión para traslado de suministros a la
Estación Espacial Internacional. Puedes ver su paso sobre La Coruña en este video .
No tiene, por lo tanto, ningún vínculo con el meteorito
52768 (1998 OR2), descubierto por la NASA en 1998, y que pasó cerca de la
tierra ese mismo día.
5 de mayo. Bólido sobre Cáceres
Los
detectores del proyecto SMART desde los observatorios astronómicos de Huelva,
Sevilla y La Hita (Toledo) han registrado el paso de una nueva bola de fuego
sobre España a 82.000 kilómetros por hora, que ha podido ser vista desde
Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha.
Fotograma del bólido observado desde Cáceres
Según
ha informado el investigador principal del proyecto SMART, José María Madiedo,
del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), la bola de fuego ha sido
grabada a las 3:43 horas de la madrugada del pasado 5 de mayo.
El
fenómeno se ha producido al entrar en la atmósfera terrestre una roca
procedente de un asteroide a una velocidad de unos 82 mil kilómetros por hora. La
bola de fuego se inició a una altitud de unos 89 kilómetros sobre el centro de
la provincia de Cáceres y desde allí avanzó en dirección noreste,
extinguiéndose a una altitud de unos 34 kilómetros sobre el nivel del suelo. Debido
a su gran luminosidad pudo verse desde más de 400 kilómetros de distancia.
Los detectores del proyecto SMART del centro astronómico de
Calar Alto de Gérgal (Almería), La Hita (Toledo) y Sevilla han detectado una
bola de fuego que sobre las 1,44 dela
madrugada del 19 de mayo ha cruzado los cielos del noreste de España y sobrevolado
la provincia de Zaragoza, aunque su gran luminosidad hizo que pudiese verse
desde más de 500 kilómetros de distancia.
José María Madiedo ha determinado que la roca que originó
este fenómeno entró en la atmósfera a unos 83.00 kilómetros por hora. La roca
procedía de un asteroide, de modo que el choque con la atmósfera a esta enorme
velocidad hizo que se volviese incandescente, generándose así una bola de fuego
que se inició a una altitud de unos 92 kilómetros sobre el suroeste de la
provincia de Zaragoza.
Fotograma del bólido detectado sobre Zaragoza
Desde allí, el bólido avanzó en dirección suroeste,
extinguiéndose a unos 28 kilómetros de altitud. La longitud total recorrida en
la atmósfera por esta roca fue de unos 68 kilómetros. Puedes ver la grabación en este enlace.
También sobre Cataluña, Baleares, la Comunidad Valenciana,
Madrid, La Rioja, País Vasco y otras regiones peninsulares han sido detectadas
bolas de fuego durante estas últimas semanas, hasta sumar cerca de una
veintena.
Curioso, al menos. Desde hace varios días no dejo de leer
noticias en medios digitales y mensajes en las redes sociales sobre la
presencia en nuestros cielos de extrañas luces en formación. Han sido vistas en
distintos lugares de España y han dado lugar a numerosas llamadas al 112 y
otros servicios de emergencia, con testigos alarmados por tan extraño suceso.
Tren de satélites Starlink
Bien. Todo tiene explicación. No se trata de naves
extraterrestres invadiendo el planeta ni de nada con tintes apocalípticos. Lo que se
está viendo es, ni más ni menos, que una serie de satélites de comunicaciones Starlink en formación.
La compañía de tecnología aeroespacial SpaceX está desarrollando un proyecto, denominado Starlink, que consiste en desplegar una
red de internet de alta velocidad que funcione a nivel global a través de
satélites de pequeño tamaño.
La intención de la empresa es poner en órbita 12.000 de
estos satélites para "ofrecer
internet de banda ancha de alta velocidad a ubicaciones donde el acceso ha sido
poco confiable, costoso o no disponible", explica en su página
oficial.
Para ello, Starlink
ya cuenta con 360 satélites en órbita, de diseño muy compacto y que pesan 260
kg cada uno. Estos aparatos tienen una particularidad: se desorbitan al final
de su vida útil y se queman en la atmósfera terrestre en un periodo de uno a
cinco años debido a que se encuentran a una latitud menor que otros satélites
(550 kilómetros frente a 1.000 kilómetros o más del resto).
Captura del paso del tren de satélites en tiempo real. Fuente: SatFlare.com
Los satélites tienen cuatro potentes antenas que le otorgan una
gran capacidad de rendimiento y que pueden redirigirse rápidamente. Cuentan con
paneles solares y sistemas de propulsión iónicos alimentados por criptón, lo
que les permite moverse y deshacerse al final de su ciclo de uso. Cuentan,
además, con un rastreador de estrellas, un sistema que les permite colocarse en el
sitio exacto para garantizar el mejor funcionamiento posible de la banda ancha.
y con un sensor que detecta los escombros para evitar colisiones.
Los planes de la empresa para este año contemplan hacer
lanzamientos de 60 satélites a la vez cada dos semanas. A mediados del año
próximo piensan tener la distribución completa inicial de 12.000 satélites y
quieren ampliarla a 42.000 más adelante. Los últimos lanzamientos de satélites
tuvieron lugar el 17 de febrero y el 18 de marzo. Probablemente, la siguiente
puesta en órbita tendrá lugar a principios de abril.
Es decir, estamos ante una nueva generación de satélites, con
gran capacidad de movimiento y de reorientación. Nada que ver con lo que
estamos acostumbrados hasta el momento. El proyecto de la empresa del magnate
Elon Musk es crear un nuevo internet satelital. Las señales de internet no se
enviarán a través de cables eléctricos como hasta ahora, sino que transmitirán
información a través del vacío del espacio, donde funciona un 47% más rápido que
en un cable de fibra óptica.
Trayectoria de los satélites el pasado día 27 de marzo. Fuente: Planetario de Pamplona
El internet satelital actual funciona gracias a grandes
naves espaciales que orbitan a más de 35.000 kilómetros por encima de en un
lugar específico del planeta.La
distancia tan grande a la que se encuentra, provoca que exista una tardanza
mayor en el envío y la recepción de datos.
En el caso de Starlink,
al situarse más cerca de la Tierra y establecer redes, pueden transportar
grandes cantidades de información muy rápidamente a cualquier lugar del
planeta, incluyendo los océanos y los lugares en los que la fibra no se puede
instalar o es muy caro hacerlo.
Así que, no hay de qué preocuparse. Actualmente, la órbita
de estos satélites pasa por encima de la Península Ibérica en sus movimientos
de recolocación, a una altura lo
suficientemente baja como para ser apreciados con la ayuda de unos prismáticos.
La tecnología continúa invadiendo nuevos territorios. Ahora, es el turno del
espacio circundante. Habrá que acostumbrarse porque la compañía china Geely tiene un proyecto similar que
empezará a desplegar este mismo año. Veremos cómo queda el espacio en poco
tiempo…
A las múltiples teorías sobre el origen del coronavirus, se ha
sumado una nueva: la amenaza habría llegado del espacio exterior a bordo de un
cometa. Su defensor es el astrofísico Chandra Wickramasinghe, conocido en
ambientes académicos por su teoría de la pansmermia, que asegura que la vida en
la Tierra llegó desde un meteorito.
Ahora, en plena crisis del coronavirus, asegura que la
pandemia también podría haber llegado desde el espacio, concretamente como
parte de un cometa que habría caído en forma de bola de fuego sobre China en
octubre de 2019. Sin embargo, no aporta ninguna prueba al respecto.
El fenómeno al que se refiere el científico fue captado el
pasado 11 de octubre sobre los cielos de Songyuan, en la provincia de Jilin, en
el noreste de China. La bola de fuego era tan brillante que podía proyectar
sombras y, durante unos instantes, pareció hacerse de día.
Científicos del Observatorio de la Montaña Púrpura de la Academia
China de Ciencias no encontraron fragmentos de meteoros en la zona. Opinan que
la bola de fuego se originó al atravesar nuestro planeta una zona de escombros
procedentes del cometa Halley.
Imágenes de la bola de fuego sobre China del 11 de octubre de 2019
La comunidad científica, por su parte, no tiene en consideración
las ideas de Wickramasinghe sobre el origen
extraterrestre de cualquier esta u otra enfermedad. En el caso concreto del
coronavirus, el patógeno se parece demasiado a otros virus terrestres como para
haber llegado del exterior.
Además, en opinión del astrobiólogo de la NASA Graham Lau, “no tendría precedentes descubrir que un
virus podría sobrevivir a la radiación a la que estaría expuesto en un viaje
tan largo por el espacio y aún así poder infectar a los humanos después de
aterrizar. Aunque es una idea interesante, no tenemos ninguna razón para
aceptar esa idea en este momento.”
La teoría de la panspermia fue creada a finales del siglo
XIX y tuvo cierta repercusión en los
años setenta gracias al propioWickramasinghe
quien, junto al astrónomo británico Fred
Hoyle, escribió “Enfermedades del espacio”,
donde aseguran que incluso el SARS o la gripe procedieron del espacio exterior.
Hoy, a partir de las 12.00 de la mañana, he sido invitado
por el amigo Samuel Hernández a participar en El Secreto de la Caverna, la sección dedicada al misterio que
dirige cada martes en Canal Extremadura Radio.
En esta ocasión, hablaremos de fenómenos forteanos en España…
en la actualidad: bolas de fuego, lagos de colores, lluvias de animales y todo
un sinfín de extraños sucesos con los que convivimos diariamente, en ocasiones,
sin ser conscientes de ello.
La actividad de meteoros en los cielos españoles,
especialmente en los andaluces, parece que ha repuntado desde el inicio de año.
Varias bolas de fuego han atravesado el cielo de la comunidad autónoma en las
últimas semanas. No hay una explicación válida para este aumento de actividad.
Lo único constatable, de momento, es su existencia.
Bola de fuego captada el 11 de febrero sobre Cádiz
Comoapuntamos,Andalucía es la región donde recientemente
han sido vistos más fenómenos de este tipo. Vamos a analizar algunos de los sucesos más importantes de entre ellos, según su brillo.
29 de enero
El primer meteorito de importancia sobre cielo español, era
divisado la medianoche del 29 de enero. Una brillante bola de fuego pudo ser
registrada a las 0.08 horas con los detectores del Proyecto SMART localizados
en los observatorios de Calar Alto (Almería), La Sagra (Granada) y Sevilla.
Además, se recogieron espectaculares imágenes en vídeo gracias al sistema de
vigilancia exterior que opera el Observatorio de Calar Alto. El espectáculo
pudo ser visto en las provincias de Sevilla y Cádiz.
«Siguiendo el análisis
llevado a cabo por José María Madiedo (Universidad de Huelva e investigador del
IAA), este bonito bólido fue producido por el impacto de una roca desprendida
de un asteroide que chocó contra nuestra atmósfera a una velocidad de unos
61.000 km/h y a una altura inicial de 61 km sobre el suelo», explican desde
el Centro Astronómico Hispano Alemán (CAHA), dependiente de la Junta de
Andalucía y el Instituto de Astrofísica de Andalucía (CSIC) en Granada. «El objeto se movió entonces en dirección
norte, comenzando sobre la provincia de Cádiz y finalizando a una altitud de 20
km sobre la provincia de Sevilla, sobre
la vertical de Arahal. “ concluyen.
Ambos videos facilitados por el CAHA se obtuvieron tanto con
el detector oeste del Proyecto SMART como con la cámara oeste de vigilancia
externa, ambos operados desde el Observatorio de Calar Alto en Almería.
31 de enero
Una nueva bola de fuego cruzó el cielo sobre las provincias
de Córdoba, Sevilla, Málaga y Cádiz la última noche del mes de enero, según informado
en su perfil de Twitter el astrofísico José María Madiedo, del Instituto de
Astrofísica de Andalucía.
El fenómeno procedía
de un cometa y cruzó, con una trayectoria prácticamente paralela con el suelo,
a una velocidad superior a los 130.000 km/h. "El choque con la atmósfera a esta enorme velocidad hizo que la roca se
volviese incandescente, generándose así una bola de fuego que se inició a una
altitud de unos 102 km sobre el suroeste de la provincia de Córdoba",
explicó el experto.
La enorme roca, que entró en la atmósfera sobre la provincia
de Málaga, se extinguió a unos 87 kilómetros de altitud al sur de Cádiz, cuando
se encontraba justo encima de la localidad de Los Barrios. En total, explica el
experto, la bola de fuego hizo un recorrido por el sur de España de unos 180
kilómetros. El fenómeno quedó registrado en los observatorios astronómicos de
La Sagra (Granada) y Sevilla
2 de febrero
Otra brillante bola de fuego grabada este día sobre el
océano Atlántico. El evento fue registrado por los detectores del proyecto
SMART desde los observatorios de La Sagra (Granada) y Sevilla.
6 de febrero
En esta ocasión, el bólido sobrevoló la provincia de Jaén en
las primeras horas de la madrugada de este día. La fase luminosa del fenómeno
comenzó a una altitud de unos 85 kilómetros, moviéndose el bólido en dirección
noroeste, siempre sobre la misma provincia, para finalizar a una altitud de
unos 30 kilómetros sobre el terreno. La velocidad que se ha podido estimar de
este objeto ha sido de 108.000 kilómetros por hora.
El evento ha podido ser registrado con los detectores del
Proyecto Smart operados en los observatorios de Sevilla y La Hita (Toledo), y
con la cámara norte de vigilancia externa del Observatorio de Calar Alto en la
sierra de los Filabres de Almería.
Esta ocasión, según el análisis preliminar llevado a cabo
por el profesor José María Madiedo, , responsable del proyecto Smart, la bola
de fuego ha tenido un origen asteroidal.Es decir, procede de un cuerpo rocoso-ya sea carbonáceo o metálico- con un tamaño inferior al de un planeta y
superior al de un meteroide.
11 de febrero
Una roca convertida en bola de fuego surcó los cielos de las
provincias andaluzas de Sevilla, Málaga y Cádiz la madrugada del 11 de febrero.
El brillante cuerpo celeste, que se generó sobre el municipio de Martín de la
Jara (Sevilla), fue percibido a la 1:58 por los detectores del proyecto SMART.
El investigador encargado responsable de dicho proyecto,
José María Madiedo, ha sido quien ha realizado el análisis de este fenómeno
ocurrido sobre Andalucía, como viene siendo habitual. La roca, que procedía de un asteroide, entró
en contacto con la atmósfera a 145 mil kilómetros por hora. El choque a tal
velocidad provocó que la roca se volviera incandescente, creándose de esta
manera la bola de fuego que comenzó a unos 109 kilómetros de altitud al este de
la provincia de Sevilla, sobre el municipio de Martín de la Jara.
La roca avanzó en dirección suroeste por las provincias de
Málaga y Cádiz hasta extinguirse 115 kilómetros después en el centro de esta
última a una altura de 57 km, concretamente muy cerca de la vertical de la
localidad de Paterna de Rivera.
19 de febrero
Un nuevo evento tuvo lugar una semana después, iniciándose a una altitud de unos 99 km, frente a la
costa de Almería. Desde allí la bola de fuego avanzó en dirección
sureste a 126.000 kilómetros por hora. Finalmente se extinguió a una altitud de
31 kilómetros sobre el nivel del mar, sobre un punto situado a unos 70 km de la
costa de Almería y a unos 90 km de la costa de Argelia, tras recorrer una trayectoria
de 81 km en la atmósfera. El fenómeno fue grabado desde el observatorio de Calar Alto,
en Almería.
23 de febrero
En este día, otra enorme bola de fuego ha surcado los cielos de España. En
torno a las 0:22 horas, diversas personas ubicadas en la zona centro y sur del
país anunciaban en redes sociales el avistamiento de una brillante bola de
fuego que atravesaba el cielo. El fenómeno se produjo al entrar en la atmósfera
terrestre una roca procedente de un asteroide a gran velocidad. La bola de fuego ha podido ser grabada por
los detectores que la Red de Bólidos y Meteoros del Suroeste de Europa opera en
el Complejo Astronómico de La Hita (Toledo) y por los detectores que esta misma red de investigación tiene instalados
en los observatorios de Calar Alto (Almería), Sierra Nevada (Granada) y Sevilla.
El fenómeno ha sido analizado por el investigador
responsable del Proyecto SMART, el astrofísico José María Madiedo del Instituto
de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC). Este análisis ha permitido determinar
que la roca que originó esta bola de fuego entró en la atmósfera a unos 43 mil
kilómetros por hora sobre la vertical de la provincia de Almería.
Esta enorme velocidad hizo que la roca se volviese
incandescente a una altura de unos 70 km sobre el nivel del suelo, generándose
así una bola de fuego tan brillante que pudo ser vista desde más de 500
kilómetros de distancia. El
fenómeno avanzó en dirección sureste, hacia África. Finalmente se extinguió a
una altitud de unos 29 kilómetros sobre el nivel del mar, a unos 50 kilómetros
de distancia de la costa de Argelia. En estos momentos se está
estudiando si parte de la roca habría podido sobrevivir a su brusco paso por la
atmósfera terrestre y, de esta manera, habría podido caer al mar Mediterráneo.
El pasado día 19 de febrero , como hemos visto, se detectó otra bola de fuego
sobre la misma zona, aunque entre ambas no habría ninguna relación entre sí.
Y también sobre el
resto del país
Pero no sólo en Andalucía se han registrado fenómenos
luminosos recientemente. Así, desde el inicio del año, al menos quince bólidos
más han sido vistos sobre Aragón, Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid, País
Vasco, La Rioja, Navarra, Murcia y la isla canaria de La Palma. Uno de los más
impresionantes fue detectado por las cámaras de la Agrupación Astronómica Ibiza
(AAE) durante la madrugada del 14 de febrero, cuando un bólido entró en la atmósfera terrestre y cruzó
el cielo de la isla.
¿Qué está
sucediendo? ¿Por qué este número elevado de eventos en nuestros cielos? Según afirman los
expertos del proyecto SMART, no existe una explicación por la cual se esté
produciendo este repunte y, concretamente, sobre los cielos andaluces. En el caso concreto de esta
comunidad,Andalucía cuenta con un
importante sistema de cámaras que son testigos de todo lo que ocurre, equipos de videodetección de
meteoroides en varias ubicaciones que permiten monitorizar el
espacio aéreo en un radio de unos 500
a 600 kilómetros. De ahí que se registren con tanta claridad este tipo
de fenómenos y pueda darse la sensación de que haya más que en otras
ubicaciones.
Parece ser que, de momento, podemos estar tranquilos y se
trata –simplemente- de una mera coincidencia en el aumento de registros y consecuencia de la
avanzada tecnología que manejamos…
La cuenta oficial en Twitter de Cataluya Radio ha publicado
un vídeo de una cámara de seguridad en el que se aprecia cómo un vehículo
arrolla a la bandada de estorninos. Ni lluvias extrañas, ni nubes tóxicas, ni cables de alta tensión. Un atropello.
Los Agentes Rurales tienen abierta una investigación para
determinar qué ha matado a decenas de
pájaros que han aparecido esparcidos por una carretera cercana al polígono
petroquímico de Tarragona. Las aves, estorninos, fueron halladas este domingo
por la tarde en la autovía que conecta Tarragona con Salou, cerca del parque
Port Aventura. Eran cerca de un centenar de pájaros y estaban repartidos sobre
el asfalto, en un radio de diez metros.
Fue poco después de las cinco de la
tarde del domingo cuando varias llamadas telefónicas avisaron del suceso a
Emergencias y a los Mossos d'Esquadra, y se procedió a movilizar a los Agentes
Rurales para que acudiesen al lugar y tomasen muestras de los animales muertos.
Este lunes, el cuerpo de Agentes Rurales ha comunicado que
sigue con los análisis para aclarar las causas de las muertes, pero descarta
que fallecieran a consecuencia de una nube tóxica. Protección Civil también ha
apuntado no tener constancia de que, en las últimas horas, se hubiera producido
alguna fuga o accidente químico en el polígono industrial. El punto donde
aparecieron los pájaros queda cerca de la fábrica de la empresa Iqoxe, que
explotó el mes pasado, provocando la muerte de tres personas y heridas en otras
siete. Hay una investigación judicial, bajo secreto de sumario, sobe el
accidente químico pero siguen sin concretarse las causas de la explosión.
Una de las hipótesis con que trabajan los Agentes Rurales es
que los pájaros murieran arrollados por algún vehículo. Cristina Sánchez,
delegada en Cataluña de la entidad SEO-Birdlife, apunta que el atropello es una
teoría "singular". Pese a
que los estorninos vuelan en bandadas y a poca altura, lo que facilitaría que
un camión o un autobús hubiera podido embestirles, el estado que presentaban
los ejemplares hallados plantea dudas al respecto. "Si descartan la nube tóxica, tenemos que creerlo, pero la posibilidad
de que muriesen atropellados me extraña porque no se ven a los animales
destrozados".
Sánchez indica que, si se excluye la posibilidad de nube
tóxica, es necesario determinar si pudieron morir envenenados por otra clase de
contaminación, "por pesticidas o por
algo que comieran en algún campo cercano", apunta. La entidad
ecologista Gepec, muy activa en Tarragona a la hora de reivindicar que se hagan
estudios sobre la calidad del aire, ha lanzado mensajes en las redes sociales
buscando testigos del suceso y pidiendo información que pueda ayudar a poner
luz sobre el caso.
Puedes ver una grabación de los animales muertos a continuación:
Palomas muertas en Badalona
De forma paralela, los Agentes Rurales tienen otras
diligencias abiertas en Badalona, a un centenar de kilómetros de distancia de
Tarragona, por un episodio similar. El Ayuntamiento ha confirmado este lunes el
hallazgo de unas 200 palomas muertas en distintos puntos de la ciudad. Los
técnicos del consistorio han retirado los cadáveres que se habían localizado
sobretodo en la zona de Pep Ventura y en Sant Roc, y han recogido también
restos de pienso hallados en la vía pública, para investigar la hipótesis de un
posible envenenamiento. Los Agentes Rurales han tomado muestras de los pájaros
muertos para analizarlas.
Lagos de colores, islas fantasmas, lluvias de animales,
decenas de bolas de fuego,… todo esto y más ha sucedido en España durante el
último año. Y lo hemos contado aquí, en España
Forteana, el lugar de reunión de los fenómenos insólitos de la Naturaleza
en nuestro país.
Cumplimos un año y queremos dar las gracias a los miles de
amigos que se han acercado a nosotros para conocer esos hechos forteanos que se producen en nuestros
cielos y nuestros campos. Al igual que queremos agradecer a los medios que se
han hecho eco de nuestra iniciativa y nos han dado cabida en sus espacios.
¿Sabías que recientemente han sido grabadas varias islas
fantasma frente a las costas catalanas y asturianas? En al menos cuatro
ocasiones los atónitos testigos se han encontrado frente a frente a una isla donde
nunca había habido tierra alguna.
¿Una ilusión óptica, un barco de enormes dimensiones, un
fake? Lee la historia completa en el último número de la revista
Phenomena Magazine, a partir de la página 6.
El pasado día 15 de enero, el Consorcio del Delta del
Llobregat publicó en su cuenta de twitter, la noticia de la presencia de unos
"proyectiles en llamas" que
fueron vistos la tarde anterior en el
cielo de este espacio natural.
El organismo, consultado por ElCaso.com, asegura que no
tiene constancia que antes hubieran visto algo similar en la zona. Quien firma
las fotografías y fue testigo en primera persona es el ornitólogo Jaume Bartra
quien se encontraba en el lugar observando aves.
El experto asegura que vio sobre las seis de la tarde "dos estelas blancas" en dirección
sur hacia el delta del Llobregat, concretamente encima del Prat de Llobregat.
De repente, estas estelas desaparecieron y la situada a la derecha del testigo se
convirtió en un "humo negro, gris,
como lo que vemos cuando se quema un contenedor con una pequeña bola de fuego
en uno de los extremos".
Bartra asegura que no le pareció que fuera un avión y
durante quince minutos pudo captar la imagen que perdió cuando el humo se iba
propagando dirección sur hacia el Garraf. ¿Qué fenómeno pudo causar estas
imágenes?
Se han planteado varias hipótesis para explicar lo grabado.
Desde que sea basura espacial reentrando en la atmósfera hasta la opinión dada
por Tomás Molina, meteorólogo de TV3, que creeque puede tratarse de “dos aviones
a diferentes alturas volando en la misma dirección. La estela de condensación
iluminada por el sol le da el color rojo oscuro". Bartra, por su parte,
asegura que no se veía rojo: "Era el
color oscuro de un incendio".
Si alguno de los lectores de España Forteana ha sido testigo de este suceso o puede aportar más información, puede contactar con la
Redacción en criptospain@yahoo.es .
Fuentes: Consorcio del Delta del Llobregat y ElCaso.com